El abuelo : el nonno Pino
Su abuelo, un sabio filósofo y matemático era su fuente de inspiración. El nonno les contaba historias de héroes legendarios, hazañas épicas y valientes viajes a tierras desconocidas. Sus palabras eran como un portal a mundos lejanos y emocionantes, y los dos hermanos escuchaban con los ojos brillantes y los corazones llenos de admiración.
El nonno admiraba los antiguos poetas y filósofos, como Virgilio, su poeta preferido, a quien contemplaba profundamente.
Sus visitas eran un evento especial que llenaba la residencia de emoción y anticipación. Los niños se reunían alrededor del nonno, ansiosos por escuchar sus cautivadoras historias y aprender las lecciones que compartía.
En esas tardes doradas, el nonno transportaba a Marco y Pablo a mundos antiguos y mágicos a través de sus narraciones.
Les inculcaba el amor por la poesía, la filosofía y la exploración, alentándolos a mantener sus mentes abiertas y sus corazones valientes.
Los dos hermanos admiraban al nonno no solo por su sabiduría, sino también por su habilidad para transmitir la emoción y la maravilla de la vida a través de sus historias. Cada semana, esperaban con impaciencia su llegada y se sumergían en las aventuras que compartía.
En su residencia veraniega junto al mar, Los hermanos encontraron un tesoro invaluable en las historias de su abuelo, un tesoro que los inspiraría a emprender su propia aventura en el futuro. A medida que crecían, llevaban consigo las lecciones y el amor por la exploración que el nonno les había enseñado, sabiendo que, en algún momento, su propio viaje lleno de aventuras los esperaba.
Definitamente el nonno le dijo a sus nietos que tenía varias historias que contar :
la primera sería la exploración del universo rumbo a la constelación de Dinosaurio con una tortuga mágica y voladora.